El libro de Mateo es un Evangelio que contiene Historia Narrativa, Genealogía, Parábolas, Sermones y algunos Oráculos Proféticos. Fue escrito por Mateo (Leví), el Discípulo de Cristo alrededor del 48-50 dC La palabra clave en Mateo es “Reino” y se usa 28 veces. Las personalidades de este libro incluyen al Mesías Jesucristo, Sus padres María y José, los Doce Discípulos, el profeta Juan el Bautista y otros tipos de líderes. Estos líderes incluyen a los que están en el gobierno como Pilato y líderes religiosos como los fariseos (que intentan obstaculizar la obra de Jesús). El libro de Mateo es el primero de los evangelios sinópticos y fue escrito para revelar al Señor Jesús como el Mesías, el Rey de los judíos, del linaje de David. También fue escrito para convencer a los judíos de que Jesucristo era en verdad su Mesías tan esperado. • Los capítulos 1-4 de Mateo tratan principalmente del nacimiento milagroso de Jesús y los acontecimientos que rodearon su vida temprana. Esto involucra principalmente la historia de Navidad que se cuenta comúnmente, pero también incluye la genealogía de Jesús, que se remonta a Abraham. “Dará a luz un hijo; y llamarás su nombre Jesús, porque él salvará a su pueblo de sus pecados” (1:21). • Los capítulos 5-25 consisten en el ministerio de Jesús desde la interdicción de Juan el Bautista hasta el punto de Su muerte en el Calvario. Estos capítulos son vitales para nuestro conocimiento de Jesucristo y son mucho de lo que sabemos acerca de Dios viviendo como un hombre perfecto en la Tierra. Estos pasajes incluyen el famoso Sermón de la Montaña de Jesús, numerosos milagros y enseñanzas invaluables para todos los que escuchen y sigan. • Capítulos 26-28, contienen la muerte y resurrección de Jesús. Estos capítulos presentan la verdad de las “Buenas Nuevas” y acerca de cómo Jesús tomó los pecados del mundo sobre Sí mismo. Este es el tema central de la salvación por la sola fe en la obra completa y acabada de Cristo Jesús en la cruz. La salvación es posible solo a través de Su muerte, Su sepultura y Su resurrección de entre los muertos, todo por el bien de los pecadores. Numerosas y sorprendentes profecías del Antiguo Testamento se cumplen con frecuencia en estos capítulos finales. Algunos de estos son Su traición por treinta piezas de plata por parte de Judas, la crucifixión con dos ladrones, y los que meneaban la cabeza hacia Jesús mientras aún estaba en la cruz.

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